Cena en el palacio de la discordia de Tim Powers.

Cena en el palacio de la discordia de Tim Powers.

1995. Fantástico, Ciencia Ficción. P: 6.5/10.

Autor: Tim Powers.

Sinopsis: Gregorio Rivas era un redentor que gozaba de gran fama por haber conseguido rescatar a más personas que nadie del siniestro y misterioso culto religioso liderado por el enigmático Norton Jaybrush. Rivas estuvo inmerso en el culto, pero logró encontrar una manera de contrarrestar los efectos del sacramento, la droga alucinógena usada para atrapar nuevos adeptos y lavarles el cerebro, y logró huir. Por eso, gracias a sus conocimientos, podía infiltrarse en el culto para recuperar a las personas señaladas por sus clientes. Pero ahora está retirado, se ha cansado de jugarse el pellejo y se dedica a su gran afición, la música, tocando su pelícano por diversos locales con creciente éxito.

Sin embargo cuando le proponen recuperar del culto a Urania Barrows, un antiguo amor fracasado, decide que esta última aventura le puede llevar de nuevo a los brazos de ella. Así pues, Rivas vuelve a infiltrarse en el culto, iniciando una búsqueda que le llevaré a conocerse a sí mismo y sus propios límites, así como también descubrirá los más oscuros y mejor guardados secretos de Norton Jaybrush y de su misteriosa secta religiosa.

Comentarios: Un mundo cambiado, una sociedad post-apocalíptica, extraña como esa moneda que es el coñac.

Después de la brillante "Las puertas de Anubis", una historia compleja en giros sorprendentes, en referencia históricas y mitológicas nos hace entrega de esta novela de Ciencia Ficción que es, en sí, una road movie, un viaje en busca de un antiguo amor captado por una extraña secta, lo que le permite al autor hacer cierta crítica interesada sobre el nacimiento de los cultos religiosos y su utilización.

Hay muy buenas ideas pero la trama es en exceso lineal y, ya se sabe, que el camino más corto entre dos puntos es la línea recta.

Los personajes no están demasiado logrados pues casi todo se centra en Rivas y sus encuentros y desencuentros. Mucho mejor los escenarios apocalípticos descritos y los extraños seres que pueblan ese mundo como los hemogoblins (unos extraños vampiros que adoptan la forma de la víctima al tiempo que les chupan la sangre) o esos arbustos rodantes (epicursores) con cabezas y brazos...

Lo mejor es hacia el final.